Buen rollito pre navideño

Mi jefa me trata como una madre o como una esposa muy atenta. Me ha regalado tres pares de calcetines, una braga para el cuello, una luz para la bicicleta, una tartera y una sudadera azul clarito. La sudadera ha sido el regalo estrella.
No mantengo una relación sentimental con mi jefa. Esta buena mujer es feliz en su matriomonio. Se trata de que le tocó a ella, en el sorteo del "amigo invisible", hacerme los regalos a mi.
Y a mi me ha tocado hacérselos al jefe de producción, un buen chico, el que me da las órdenes más directas para mis viajes furgoneteriles. No he sido tan práctico como la jefa. Yo le he regalado un dominó con dibujos de frutas o algo así, un muñequito de guiñol del Conde Drácula, un barquito pequeño de madera y un juego de vasitos de licor. Y el regalo estrella ha sido un tocho muy gordo con el humor gráfico de "El Gran Vázquez"
Hemos hecho un corro y no hemos obsequiado con sonrisas, risas, regalos, besos y abrazos.
Ayer fue el primer día que sentí frío de verdad. El Invierno llega más tarde a Murcia y parece el prólogo del Otoño. Las calles, desde anteayer, están llenas de hojas caídas de los árboles.
Le pongo la calefacción a la furgoneta y me jodo en la bici con el frío mañanero.
Me atrevo a creer un poquito en la Humanidad al sentir el afecto de mis compañeros, aunque sea fingido, ¡es el calor humano!